Meditación de palabra de Dios para la semana XXI del Tiempo Ordinario

Lunes: 

Santa María Reina, Memoria 

La fiesta de hoy fue instituida por el Papa Pío XII, en 1955 para venerar a María como Reina igual que se hace con su Hijo, Cristo Rey, al final del año litúrgico. A Ella le corresponde no sólo por naturaleza sino por mérito el título de Reina Madre.

María ha sido elevada sobre la gloria de todos los santos y coronada de estrellas por su divino Hijo. Está sentada junto a Él y es Reina y Señora del universo.

María fue elegida para ser Madre de Dios y ella, sin dudar un momento, aceptó con alegría. Por esta razón, alcanza tales alturas de gloria. Nadie se le puede comparar ni en virtud ni en méritos. A Ella le pertenece la corona del Cielo y de la Tierra.

María está sentada en el Cielo, coronada por toda la eternidad, en un trono junto a su Hijo. Tiene, entre todos los santos, el mayor poder de intercesión ante su Hijo por ser la que más cerca está de Él.

La Iglesia la proclama Señora y Reina de los ángeles y de los santos, de los patriarcas y de los profetas, de los apóstoles y de los mártires, de los confesores y de las vírgenes. Es Reina del Cielo y de la Tierra, gloriosa y digna Reina del Universo, a quien podemos invocar día y noche, no sólo con el dulce nombre de Madre, sino también con el de Reina, como la saludan en el cielo con alegría y amor los ángeles y todos los santos.

La realeza de María no es un dogma de fe, pero es una verdad del cristianismo. Esta fiesta se celebra, no para introducir novedad alguna, sino para que brille a los ojos del mundo una verdad capaz de traer remedio a sus males.





Lectura del libro de Isaías 9, 1-3. 5-6
El pueblo que caminaba en tinieblas
vio una luz grande;
habitaban tierra de sombras,
y una luz les brilló.
Acreciste la alegría,
aumentaste el gozo;
se gozan en tu presencia,
como gozan al segar,
como se alegran
al repartirse el botín.
Porque la vara del opresor,
y el yugo de su carga,
el bastón de su hombro,
los quebrantaste como el día de Madián.
Porque un niño nos ha nacido,
un hijo se nos ha dado:
lleva a hombros el principado,
y es su nombre:
«Maravilla de Consejero,
Dios guerrero,
Padre perpetuo,
Príncipe de la paz».
Para dilatar el principado,
con una paz sin límites,
sobre el trono de David
y sobre su reino.
Para sostenerlo y consolidarlo
con la justicia y el derecho,
desde ahora y por siempre.
El celo del Señor de los ejércitos lo realizará.


Salmo responsorial: Salmo 112, 1-2. 3-4. 5-6. 7-8 (R.: 2)
R. Bendito sea el nombre del Señor,
ahora y por siempre.
o bien:
R. Aleluya.
Alabad, siervos del Señor,
alabad el nombre del Señor.
Bendito sea el nombre del Señor,
ahora y por siempre. R.
De la salida del sol hasta su ocaso,
alabado sea el nombre del Señor.
El Señor se eleva sobre todos los pueblos,
su gloria sobre los cielos. R.
¿Quién como el Señor, Dios nuestro,
que se eleva en su trono
y se abaja para mirar
al cielo y a la tierra? R.
Levanta del polvo al desvalido,
alza de la basura al pobre,
para sentarlo con los príncipes,
los príncipes de su pueblo. R.

Lectura del santo evangelio según san Lucas 1, 26-38

En aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David; la virgen se llamaba María.
El ángel, entrando en su presencia, dijo:
—«Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo».
Ella se turbó ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquél.
El ángel le dijo:
—«No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin».
Y María dijo al ángel:
—«¿Cómo será eso, pues no conozco a varón?».
El ángel le contestó:
—«El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer se llamará Hijo de Dios.
Ahí tienes a tu pariente Isabel, que, a pesar de su vejez, ha concebido un hijo, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible».
María contestó:
—«Aquí está la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra».
Y la dejó el ángel.

Reflexión:

La palabra de Dios nos motiva a contemplar las maravillas del Señor para así ver su luz resplandeciente, dejando de lado toda clase de oscuridad, ahora bien, el profeta Isaías  nos recuerda como Dios  manda su luz y el mundo prefiere la  oscuridad antes que a luz que procede del Señor.

En esta misma tónica el salmo nos invita a bendecir al Señor  y darle  gracias porque su nombre es santo.

El evangelio nos manifiesta que la alegría de esperar en el Señor, por ello, nos  invita a entender  la  misericordia de Dios.


Martes: 


Santa Rosa de Lima, Fiesta  ( Latinoamerica )

Rosa de Lima, la primera santa americana canonizada, nació de ascendencia española en la capital del Perú en 1586. Sus humildes padres son Gaspar de Flores y María de Oliva.

Aunque la niña fue bautizada con el nombre de Isabel, se la llamaba comúnmente Rosa y ése fue el único nombre que le impuso en la Confirmación el arzobispo de Lima, Santo Toribio. Rosa tomó a Santa Catalina de Siena por modelo, a pesar de la oposición y las burlas de sus padres y amigos. En cierta ocasión, su madre le coronó con una guirnalda de flores para lucirla ante algunas visitas y Rosa se clavó una de las horquillas de la guirnalda en la cabeza, con la intención de hacer penitencia por aquella vanidad, de suerte que tuvo después bastante dificultad en quitársela. Como las gentes alababan frecuentemente su belleza, Rosa solía restregarse la piel con pimienta para desfigurarse y no ser ocasión de tentaciones para nadie.

Una dama le hizo un día ciertos cumplimientos acerca de la suavidad de la piel de sus manos y de la finura de sus dedos; inmediatamente la santa se talló las manos con barro, a consecuencia de lo cual no pudo vestirse por sí misma en un mes. Estas y otras austeridades aún más sorprendentes la prepararon a la lucha contra los peligros exteriores y contra sus propios sentidos. Pero Rosa sabía muy bien que todo ello sería inútil si no desterraba de su corazón todo amor propio, cuya fuente es el orgullo, pues esa pasión es capaz de esconderse aun en la oración y el ayuno. Así pues, se dedicó a atacar el amor propio mediante la humildad, la obediencia y la abnegación de la voluntad propia.

Aunque era capaz de oponerse a sus padres por una causa justa, jamás los desobedeció ni se apartó de la más escrupulosa obediencia y paciencia en las dificultades y contradicciones.

Rosa tuvo que sufrir enormemente por parte de quienes no la comprendían.

El padre de Rosa fracasó en la explotación de una mina, y la familia se vio en circunstancias económicas difíciles. Rosa trabajaba el día entero en el huerto, cosía una parte de la noche y en esa forma ayudaba al sostenimiento de la familia. La santa estaba contenta con su suerte y jamás hubiese intentado cambiarla, si sus padres no hubiesen querido inducirla a casarse. Rosa luchó contra ellos diez años e hizo voto de virginidad para confirmar su resolución de vivir consagrada al Señor.

Al cabo de esos años, ingresó en la tercera orden de Santo Domingo, imitando así a Santa Catalina de Siena. A partir de entonces, se recluyó prácticamente en una cabaña que había construido en el huerto. Llevaba sobre la cabeza una cinta de plata, cuyo interior era lleno de puntas sirviendo así como una corona de espinas. Su amor de Dios era tan ardiente que, cuando hablaba de El, cambiaba el tono de su voz y su rostro se encendía como un reflejo del sentimiento que embargaba su alma. Ese fenómeno se manifestaba, sobre todo, cuando la santa se hallaba en presencia del Santísimo Sacramento o cuando en la comunión unía su corazón a la Fuente del Amor.

 Extraordinarias pruebas y gracias.

Dios concedió a su sierva gracias extraordinarias, pero también permitió que sufriese durante quince años la persecución de sus amigos y conocidos, en tanto que su alma se veía sumida en la más profunda desolación espiritual.

El demonio la molestaba con violentas tentaciones. El único consejo que supieron darle aquellos a quienes consultó fue que comiese y durmiese más. Más tarde, una comisión de sacerdotes y médicos examinó a la santa y dictaminó que sus experiencias eran realmente sobrenaturales. 

Rosa pasó los tres últimos años de su vida en la casa de Don Gonzalo de Massa, un empleado del gobierno, cuya esposa le tenía particular cariño. Durante la penosa y larga enfermedad que precedió a su muerte, la oración de la joven era: "Señor, auméntame los sufrimientos, pero auméntame en la misma medida tu amor".

Dios la llamó a Sí el 24 de agosto de 1617, a los treinta y un años de edad. El capítulo, el senado y otros dignatarios de la ciudad se turnaron para transportar su cuerpo al sepulcro.

El Papa Clemente X la canonizó en 1671.

Aunque no todos pueden imitar algunas de sus prácticas ascéticas, ciertamente nos reta a todos a entregarnos con mas pasión al amado, Jesucristo.  Es esa pasión de amor la que nos debe mover a vivir nuestra santidad abrazando nuestra vocación con todo el corazón, ya sea en el mundo, en el desierto o en el claustro.

De los escritos de santa Rosa de Lima.

El salvador levantó la voz y dijo, con incomparable majestad:
"¡Conozcan todos que la gracia sigue a la tribulación.
Sepan que sin el peso de las aflicciones no se llega al
colmo de la gracia. Comprendan que, conforme al acre-
centamiento de los trabajos, se aumenta juntamente la
medida de los carismas. Que nadie se engañe: esta es
la única verdadera escala del paraíso, y fuera de la cruz
no hay camino por donde se pueda subir al cielo!"
Oídas estas palabras, me sobrevino un impetu pode-
roso de ponerme en medio de la plaza para gritar con
grandes clamores, diciendo a todas las personas, de cual-
quier edad, sexo, estado y condición que fuesen:
"Oíd pueblos, oíd, todo género de gentes: de parte de
Cristo y con palabras tomadas de su misma boca, yo os
aviso: Que no se adquiere gracia sin padecer aflicciones;
hay necesidad de trabajos y más trabajos, para conse-
guir la participación íntima de la divina naturaleza, la
gloria de los hijos de Dios y la perfecta hermosura del
alma."
Este mismo estímulo me impulsaba impetuosamente
a predicar la hermosura de la divina gracia, me angustiaba
y me hacía sudar y anhelar. Me parecía que ya no
podía el alma detenerse en la cárcel del cuerpo, sino que
se había de romper la prisión y, libre y sola, con más
agilidad se había de ir por el mundo, dando voces:
"¡Oh, si conociesen los mortales qué gran cosa es la
gracia, qué hermosa, qué noble, qué preciosa, cuántas riquezas
 esconde en sí, cuántos tesoros, cuántos júbilos y
delicias! Sin duda emplearían toda su diligencia, afanes
y desvelos en buscar penas y aflicciones; andarían todos
por el mundo en busca de molestias, enfermedades y
tormentos, en vez de aventuras, por conseguir el tesoro
último de la constancia en el sufrimiento. Nadie se quejaría
de la cruz ni de los trabajos que le caen en suerte,
si conocieran las balanzas donde se pesan para repartir-
los entre los hombres."


Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los Corintios 10, 17—11, 2
Hermanos:
El que se gloría que se gloríe del Señor, porque no está aprobado el que se recomienda él solo, sino el que está recomendado por el Señor.
Ojalá me toleraseis unos cuantos desvaríos; bueno, ya sé que me los toleráis. Tengo celos de vosotros, los celos de Dios; quise desposaros con un solo marido, presentándoos a Cristo como una virgen intacta.


Salmo responsorial: Salmo 148, 1-2. 11-13b. 13c-14 (R.: cf. 12a. 13a)
RJóvenes y doncellas,
alabad el nombre del Señor.
O bien:
R. Aleluya.
Alabad al Señor en el cielo,
alabad al Señor en lo alto.
Alabadlo, todos sus ángeles;
alabadlo, todos sus ejércitos. R.
Reyes y pueblos del orbe,
príncipes y jefes del mundo,
los jóvenes y también las doncellas,
los viejos junto con los niños,
alaben el nombre del Señor,
el único nombre sublime. R.
Su majestad sobre el cielo y la tierra;
él acrece el vigor de su pueblo.
Alabanza de todos sus fieles,
de Israel, su pueblo escogido. R.


Lectura del santo evangelio según san Mateo 13, 44-46
En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente:
—«El reino de los cielos se parece a un tesoro escondido en el campo: el que lo encuentra lo vuelve a esconder y, lleno de alegría, va a vender todo lo que tiene y compra el campo.
El reino de los cielos se parece también a un comerciante en perlas finas que, al encontrar una de gran valor, se va a vender todo lo que tiene y la compra».

Reflexión:


El apóstol San pablo nos recuerda que debemos desapegarnos de  nosotros  mismos  y ser conducidos  hacia  la  patria del cielo, puesto que el apóstol  nos  motiva a ser imagen de Dios  para que con nuestro ejemplo hagamos recomendación de  nosotros,ya que esto nos  hace recomendarnos por el Señor  y no por  nuestras vanidades.

El salmo 148 nos  invita a darle gracias a Dios puesto que al alabarlo por su obra lo estamos  manifestando al mundo y por ende, salimos al encuentro con las maravillas de  la creación del Señor.

El evangelio nos  manifiesta que el llamado a descubrir a Cristo como lo más preciado de  nuestra vida  y así despojarnos de todo lo que tenemos  y ver las maravillas de Dios por su misericordia. 

Miércoles:
San Bartolomé Apóstol ( Fiesta) 

También llamado "Natanael"
Apóstol 
Fiesta: 24 de agosto
Etim. "hijo de Tolomai"



Bartolomé es uno de los 12 Apóstoles (Mt 10,3). 

El apóstol Felipe lo llevó a Jesús. Bartolomé es la misma persona que Natanael, mencionado en el Evangelio de San Juan, donde nos dice que era de Caná. (Jn 21,2)

Los Hechos de los Apóstoles mencionan también su presencia en Pentecostés (1,13).

Según la tradición, después de la ascensión del Señor, predicó el Evangelio en la India, donde recibió la corona del martirio.

Felipe dice a Natanael que han encontrado al Mesías esperado.  Natanael al principio duda al saber que Jesús es de Nazaret.  Felipe insistió: «Ven y lo verás.» (v.46).  Es entonces que ocurre el encuentro entre Jesús y Natanael.

"Vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: «Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño.»
-Le dice Natanael: «¿De qué me conoces?»
-Le respondió Jesús: «Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.»
-Le respondió Natanael: «Rabbí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel.»
-Jesús le contestó: «¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores.» Y le añadió: «En verdad, en verdad os digo: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.» (Jn 1:47-51)

Según la Martiriología Romana, Bartolomé predicó en la India y en Armenia, donde murió mártir. Todavía con vida le arrancaron la piel  y fue decapitado por el Rey Astyages en Derbend. Según la tradición este martirio ocurrió en Abanopolis, en la costa occidental del Mar Caspio, después de haber predicado también en Mesopotamia, Persia y Egipto.   

Según Eusebius, Pantenus de Alejandría (Siglo II) encontró en la India un Evangelio de San Mateo atribuido a Bartolomé y escrito en hebreo. Dicho evangelio es apócrifo y fue condenado en el decreto de Pseudo-Gelasius.

Las reliquias de San Bartolomé, según una tradición, fueron enterradas en la isla de Lipara y eventualmente fueron trasladadas a Benevento, Italia y después a Roma donde ahora están en la Iglesia de San Bartolomé, en la "Isola San Bartolomeo" del río Tiber. Se dice que la Reina Emma, la esposa del Rey Canute entregó uno de sus brazos a Canterbury en el siglo XI.

En la iconografía se le representa con barba, un libro y un cuchillo (utilizado en su martirio).

San Bartolomé es patrón de los carniceros, fabricantes de libros, guantes, pieles, zapateros, sastres, mercaderes de queso, viñadores, albañiles y otros. Se le invoca contra desórdenes nerviosos.

http://www.corazones.org/santos/bartolome.htm

Lectura del libro del Apocalipsis 21, 9b-14

El ángel me habló así:
—«Ven acá, voy a mostrarte a la novia, a la esposa del Cordero». Me transportó en éxtasis a un monte altísimo, y me enseñó la ciudad santa, Jerusalén, que bajaba del cielo, enviada por Dios, trayendo la gloria de Dios.
Brillaba como una piedra preciosa, como jaspe traslúcido.
Tenía una muralla grande y alta y doce puertas custodiadas por doce ángeles, con doce nombres grabados: los nombres de las tribus de Israel.
A oriente tres puertas, al norte tres puertas, al sur tres puertas, y a occidente tres puertas.
La muralla tenía doce basamentos que llevaban doce nombres: los nombres de los apóstoles del Cordero.


Salmo responsorial: Salmo 144, 10-11. 12-13ab. 17-18 (R.: cf. 12)
R. Que tus fieles, Señor, proclamen la gloria de tu reinado.
Que todas tus criaturas te den gracias,
Señor, que te bendigan tus fieles;
que proclamen la gloria de tu reinado,
que hablen de tus hazañas. R.
Explicando tus hazañas a los hombres,
la gloria y la majestad de tu reinado.
Tu reinado es un reinado perpetuo,
tu gobierno va de edad en edad. R.
El Señor es justo en todos sus caminos,
es bondadoso en todas sus acciones;
cerca está el Señor de los que lo invocan,
de los que lo invocan sinceramente. R.



 Lectura del santo evangelio según san Juan 1, 45-51

En aquel tiempo, Felipe encuentra a Natanael y le dice:
—«Aquel de quien escribieron Moisés en la Ley y los profetas, lo hemos encontrado: Jesús, hijo de José, de Nazaret».
Natanael le replicó:
—«¿De Nazaret puede salir algo bueno?».
Felipe le contestó:
—«Ven y verás».
Vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él:
—«Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño».
Natanael le contesta:
—«¿De qué me conoces?».
Jesús le responde:
—«Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi».
Natanael respondió:
—«Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel».
Jesús le contestó:
—«¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees?
Has de ver cosas mayores».
Y le añadió:
—«Yo os aseguro: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre».

Reflexión:

La palabra de Dios nos va reavivando a cimentarse sobre la figura de los doce apóstoles de Jesucristo, puesto que ellos son el signo de  la prefiguración del anuncio de  la buenas  nuevas de salvación para toda  la creación.


Con respecto al primer punto, el libro del apocalipsis, nos reafirma la  universidad de la salvación que procede de Dios,ciertamente es un llamado a reconocer la grandeza de Cristo, ya que el texto nos hace referencia a todos  los  puntos de simetría del planeta, dando a entender que el Señor ama a todos  los  hombres.

circunstancialmente a esto, nos recuerda las doce tribus de Israel, como el signo de la universalidad que nos motiva a todos a estar unidos a Dios,por ello, nos  trae a colación el camino de salvación que pasó el pueblo hasta la venida de Cristo y después nos muestra la figura de los apóstoles como signo de  la continuidad de ese  proceso salvífico de Dios que manifiesta solícitamente a todos  los  hombres para que comprendan la  verdad de Dios  y busquen el Reino. 

De este modo, el salmo nos condiciona a comprender el reinado del Señor, puesto que el rey del Universo y como fuente de su gracia debemos acudir a Él y así buscar su salvación, por ende, es un llamado a darle  gracias a Dios por  todo lo que  nos regala como signo de su misericordia. 

Por otro lado el evangelio nos muestra  la figura de Natanael, que es  motivado por Felipe para ir detrás del Señor, sin embargo, el Señor le  manifiesta  su salvación y como Dios ha hecho grandes cosas en su vida y así le muestra su historia y le toca para sanar las  heridas que tenía para ser le siguiera , pues  Jesús  lo reconoce  como un hombre justo y de recto actuar. 


Jueves: 


Comienzo de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 1, 1-9
Yo Pablo, llamado a ser apóstol de Cristo Jesús por designio de Dios, y Sóstenes, nuestro hermano, escribimos a la Iglesia de Dios en Corinto, a los consagrados por Cristo Jesús, a los santos que él llamó y a todos los demás que en cualquier lugar invocan el nombre de Jesucristo, Señor de ellos y nuestro.
La gracia y la paz de parte de Dios, nuestro Padre, y del Señor Jesucristo sean con vosotros.
En mi acción de gracias a Dios os tengo siempre presentes, por la gracia que Dios os ha dado en Cristo Jesús.
Pues por él habéis sido enriquecidos en todo: en el hablar y en el saber; porque en vosotros se ha probado el testimonio de Cristo.
De hecho, no carecéis de ningún don, vosotros que aguardáis la manifestación de nuestro Señor Jesucristo.
Él os mantendrá firmes hasta el final, para que no tengan de qué acusaros en el día de Jesucristo, Señor nuestro.
Dios os llamó a participar en la vida de su Hijo, Jesucristo Señor nuestro. ¡Y él es fiel!


Salmo responsorial: Salmo 144, 2-3. 4-5. 6-7 (R.: 1)
R. Bendeciré tu nombre por siempre, Dios mío, mi rey.
Día tras día, te bendeciré
y alabaré tu nombre por siempre jamás.
Grande es el Señor, merece toda alabanza,
es incalculable su grandeza. R.
Una generación pondera tus obras a la otra,
y le cuenta tus hazañas.
Alaban ellos la gloria de tu majestad,
y yo repito tus maravillas. R.
Encarecen ellos tus temibles proezas,
y yo narro tus grandes acciones;
difunden la memoria de tu inmensa bondad,
y aclaman tus victorias. R.


 Lectura del santo evangelio según san Mateo 24, 42-51
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
—«Estad en vela, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor.
Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora de la noche viene el ladrón, estaría en vela y no dejaría abrir un boquete en su casa.
Por eso, estad también vosotros preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre.
¿Dónde hay un criado fiel y cuidadoso, a quien el amo encarga de dar a la servidumbre la comida a sus horas?
Pues, dichosos ese criado, si el amo, al llegar, lo encuentra portándose así. Os aseguro que le confiará la administración de todos sus bienes.
Pero si el criado es un canalla y, pensando que su amo tardará, empieza a pegar a sus compañeros, y a comer y a beber con los borrachos, el día y la hora que menos se lo espera, llegará el amo y lo hará pedazos, mandándolo a donde se manda a los hipócritas.
Allí será el llanto y el rechinar de dientes».

Reflexión:


En dos palabras, el Señor nos llama a vivir su gracia y estas  son: obediencia  y conversión .

Pues bien, el apóstol San Pablo nos recuerda la obediencia a Dios y seguir su voluntad, para así vivir arduamente el llamado que Él nos hace, puesto que  Dios quiere que este firmes hasta el final y no permitir que nada nos aleje del Señor, para así entrar justos ante Él, por ello, Pablo también muestra el sentido de  orar por  una comunidad para alcance su perfección.

Por ello, es bueno recalcar el don de la obediencia  puesto que en ella alcanzamos la perfección, ya que ésta nos suscita a cambiar nuestro proceder y ser acogidos  por el Señor. 


El salmo nos  motiva a reconocer a Dios  como el rey de nuestra vida y que  fuera de Él no existe nadie y, que por tanto, es un llamado a serle fieles para estando con el corazón predispuesto le sirvamos, reconociendo las maravillas que hace por cada uno de nosotros.


El evangelio siguiendo este hilo nos motiva a ser fieles y obedientes a ese llamado que Dios nos ha hecho, ya que es una invitación a servir a Dios y ser guiados  por Él, por ello, debemos tener un proceder coherente a eso que anunciamos, no obstante, aunque es fuerte  la advertencia que hace el Señor, nos invita a estar preparados  y manifestar su palabra a toda la creación, puesto que esto es lo que nos dice el Señor Jesucristo, pues la metáfora del criado fiel, es para decirnos que debemos ser ejemplos  y servir con diligencia a aquellas  personas que Él nos ha puesto a  nuestro cuidado . 


Viernes: 

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 1, 17-25

Hermanos:
No me envió Cristo a bautizar, sino a anunciar el Evangelio, y no con sabiduría de palabras, para no hacer ineficaz la cruz de Cristo.
El mensaje de la cruz es necedad para los que están en vías de perdición; pero para los que están en vías de salvación —para nosotros— es fuerza de Dios.
Dice la Escritura: «Destruiré la sabiduría de los sabios, frustraré la sagacidad de los sagaces».
¿Dónde está el sabio? ¿Dónde está el escriba? ¿Dónde está el sofista de nuestros tiempos? ¿No ha convertido Dios en necedad la sabiduría del mundo?
Y como, en la sabiduría de Dios, el mundo no lo conoció por el camino de la sabiduría, quiso Dios valerse de la necedad de la predicación, para salvar a los creyentes.
Porque los judíos exigen signos, los griegos buscan sabiduría; pero nosotros predicamos a Cristo crucificado: escándalo para los judíos, necedad para los gentiles; pero para los llamados a Cristo —judíos o griegos—, un Mesías que es fuerza de Dios y sabiduría de Dios.
Pues lo necio de Dios es más sabio que los hombres; y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres.


Salmo responsorial: Salmo 32, 1-2. 4-5. 10ab y 11 (R.: 5b)
R. La misericordia del Señor llena la tierra.
Aclamad, justos, al Señor,
que merece la alabanza de los buenos.
Dad gracias al Señor con la cítara,
tocad en su honor el arpa de diez cuerdas. R.
Que la palabra del Señor es sincera,
y todas sus acciones son leales;
él ama la justicia y el derecho,
y su misericordia llena la tierra. R.
El Señor deshace los planes de las naciones,
frustra los proyectos de los pueblos,
pero el plan del Señor subsiste por siempre,
los proyectos de su corazón, de edad en edad. R.


 Lectura del santo evangelio según san Mateo 25, 1-13

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola:
—«Se parecerá el reino de los cielos a diez doncellas que tomaron sus lámparas y salieron a esperar al esposo.
Cinco de ellas eran necias y cinco eran sensatas.
Las necias, al tomar las lámparas, se dejaron el aceite; en cambio, las sensatas se llevaron alcuzas de aceite con las lámparas.
El esposo tardaba, les entró sueño a todas y se durmieron.
A medianoche se oyó una voz:
"¡Que llega el esposo, salid a recibirlo!".
Entonces se despertaron todas aquellas doncellas y se pusieron a preparar sus lámparas.
Y las necias dijeron a las sensatas:
"Dadnos un poco de vuestro aceite, que se nos apagan las lámparas".
Pero las sensatas contestaron:
"Por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras, mejor es que vayáis a la tienda y os lo compréis".
Mientras iban a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban preparadas entraron con él al banquete de bodas, y se cerró la puerta.
Más tarde llegaron también las otras doncellas, diciendo:
"Señor, señor, ábrenos".
Pero él respondió:
"Os lo aseguro: no os conozco".
Por tanto, velad, porque no sabéis el día ni la hora».


Reflexión:


Fijémonos,pues, en lo que el apóstol San Pablo nos dice en su primera carta a la comunidad de Corinto, puesto que nos habla de la importancia de la cruz en la salvación del mundo, he aquí cómo nuestra fe procede de árbol de la cruz, que gran medida para muchos es necedad este mensaje, ya que va en contra de sus  ideales, por ello, Dios se vale de los olvidados y pequeños de la sociedad para  hacer cosas grandes por medio de su evangelio, no obstante, Pablo nos afirma que nuestra vida está  unida a Cristo.

Entonces,es justo es decir que Dios  manifiesta su salvación al género humano por medio la entrega de su Hijo, esto acaece en que como nos manifiesta el apóstol : " Pues lo necio de Dios es más sabio que los hombres; y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres."; es por tal hecho que la sabiduría de Dios está por encima de la del hombre, puesto que éste busca satisfacer sus  necesidades a  través de raciocinios inútiles y que nos hacen esclavos de  nuestras pasiones, por consiguiente, es llamado a escuchar el mensaje salvífico de la cruz y que en ella encontramos el remedio de nuestros males, porque de allí pendió la salvación del mundo. 

Para entender cómo Dios muestra su salvación al mundo, el salmo 32, nos  manifiesta que debemos resguardarnos en su palabra que es la auténtica sabiduría que nos invita a ver su salvación, nos manifiesta el autor hagiógrafo que Dios siempre vela por sus fieles, porque su misericordia se da por medio de  las obras magníficas que hace para con su pueblo.  

Reconociendo, Jesús, que sus discípulos aún no estaban preparados para los acontecimientos que se venía para la historia de la salvación les manifiesta muchas parábolas para disponer sus corazones a lo que Dios quiere de ellos para ese momento crucial. 

Si se compara todo esto con el texto del evangelio, podemos ver que la parábola de las doncellas nos condiciona a  entender que Dios viene a nosotros en el tiempo que menos lo pensemos, por tanto, Cristo es  nuestro horizonte, ya que  la enseñanza de esta parábola nos suscita a estar en  velad, puesto que el mensaje salvífico de Dios llega a prisa para motivarnos a gozar de su presencia, si y sólo si ponemos nuestra confianza en Él manteniendo encendida  la luz de su palabra que  ha sido cultivada en nosotros.




Sábado : 


Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 1, 26-31

Hermanos, fijaos en vuestra asamblea, no hay en ella muchos sabios en lo humano, ni muchos poderosos, ni muchos aristócratas; todo lo contrario, lo necio del mundo lo ha escogido Dios para humillar a los sabios, y lo débil del mundo lo ha escogido Dios para humillar el poder.
Aún más, ha escogido la gente baja del mundo, lo despreciable, lo que no cuenta para anular a lo que cuenta, de modo que nadie pueda gloriarse en presencia del Señor.
Por él vosotros sois en Cristo Jesús, en este Cristo que Dios ha hecho para nosotros sabiduría, justicia, santificación y redención.
Y así —como dice la Escritura— «el que se gloríe, que se gloríe en el Señor».



Salmo responsorial: Salmo 32, 12-13. 18-19. 20-21 (R.: 12b)
R. Dichoso el pueblo que el Señor se escogió como heredad.
Dichosa la nación cuyo Dios es el Señor,
el pueblo que él se escogió como heredad.
El Señor mira desde el cielo,
se fija en todos los hombres. R.
Los ojos del Señor están puestos en sus fieles,
en los que esperan en su misericordia,
para librar sus vidas de la muerte
y reanimarlos en tiempo de hambre. R.
Nosotros aguardamos al Señor:
él es nuestro auxilio y escudo;
con él se alegra nuestro corazón,
en su santo nombre confiamos. R.


 Lectura del santo evangelio según san Mateo 25, 14-30

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola:
—«Un hombre, al irse de viaje, llamó a sus empleados y los dejó encargados de sus bienes: a uno le dejó cinco talentos de plata, a otro dos, a otro uno, a cada cual según su capacidad; luego se marchó.
El que recibió cinco talentos fue en seguida a negociar con ellos y ganó otros cinco. El que recibió dos hizo lo mismo y ganó otros dos.
En cambio, el que recibió uno hizo un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor.
Al cabo de mucho tiempo volvió el señor de aquellos empleados y se puso a ajustar las cuentas con ellos.
Se acercó el que había recibido cinco talentos y le presentó otros cinco, diciendo:
"Señor, cinco talentos me dejaste; mira, he ganado otros cinco".
Su señor le dijo:
"Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; pasa al banquete de tu señor".
Se acercó luego el que había recibido dos talentos y dijo:
"Señor, dos talentos me dejaste; mira, he ganado otros dos".
Su señor le dijo:
"Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; pasa al banquete de tu señor".
Finalmente, se acercó el que había recibido un talento y dijo:
"Señor, sabía que eres exigente, que siegas donde no siembras y recoges donde no esparces, tuve miedo y fui a esconder tu talento bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo".
El señor le respondió:
"Eres un empleado negligente y holgazán. ¿Con que sabías que siego donde no siembro y recojo donde no esparzo? Pues debías haber puesto mi dinero en el banco, para que, al volver yo, pudiera recoger lo mío con los intereses. Quitadle el talento y dádselo al que tiene diez. Porque al que tiene se le dará y le sobrará, pero al que no tiene, se le quitará hasta lo que tiene. Y a ese empleado inútil echadlo fuera, a las tinieblas; allí será el llanto y el rechinar de dientes"».


Reflexión:

Siempre he pensado que, el hombre es más  grande cuando se  humilla ante Dios, por ello, el apóstol San Pablo, nos recuerda que la sabiduría no está en el comprender del porqué de las cosas, ya que Dios mira el corazón humillado y lo enaltece, esto trae a colación lo que el salmo 50 nos  llama y es a convertir  nuestro corazón , para  pedirle al Señor sabiduría  y dejar de  lado todo aquello que  nos  hace ir detrás del pecado.

Por consiguiente, el llamado es a ser humildes para reconocer que  nos equivocamos  y que  no somos perfectos y que  vamos en camino a  la  perfección gracias a Cristo que nos motiva a ser fiel escucha de su palabra y manifestar la sabiduría que  hemos recibido de Dios  por  medio del Señor Jesucristo que se entregó por  nosotros.


El salmo 32 nos invita a reconocer que Dios llama a su pueblo y que  por tal hecho, el Señor  lo escoge como el lote de su  heredad , puesto que  manifiesta su salvación y esto es  posible  gracias a Él que  nos  nos dió la salvación , por  tanto, escuchemos  la  palabra de Dios que  nos  motiva a ser  obediente a su palabra.


Por otro lado, el evangelio nos  manifiesta el llamado que Dios nos hace y por  tanto, nos dota de sus dones para que  por medio de ellos demos  frutos abundantes y así poder ver la grandeza de Dios, ya que el Señor nos  invita a dar  más de  nosotros de  eso que  hemos recibido , y es a eso a  lo que nos  llama  la  parábola de  los  talentos a ser servidores fieles que demos frutos  para el Reino.